Es muy probable que en el
transcurso de estas crisis caigamos en proceso de auto cuestionamientos, que devengan en perdidas de la autoestima, desvalorización de nosotros mismos, porque este es el plan de los grupos concentrados,
quebrar nuestra voluntad.
FONDOS
BUITRES EL PROCESO
Es necesario para
entender cabalmente el episodio "fondos buitres" que tengamos claro
el proceso en toda su
amplitud y fundamentalmente en el contexto histórico, en el que dicho episodio
se desarrolla y cuales son las relaciones de poder establecidas.
Podemos decir que la
historia de la deuda externa Argentina nace con la República misma, con
aquel préstamo ignominioso que su primer Presidente, Bernardino Rivadavia, toma
con la Baring Brothers
la banca inglesa, y que recién se terminara de pagar, durante la presidencia de
Peron, cien años después. Pero para simplificar la lectura, iniciaremos el análisis
en los tiempos de irrupción de la dictadura, allá por 1976, cuando el total de
la deuda se aproximaba a los 7.000 millones de dólares y que al volver la Democracia, ocho años
después, rondaba los 45000 millones de dólares. Este aumento exorbitante no es
casual, es el fruto de la decisión política de los centros de poder mundial, de
incentivar el endeudamiento de los países subdesarrollados, para que esa deuda
funcione como un verdadero disciplinador de esos países, de su clase política,
de la burguesía nacional y fundamentalmente, como un arma extorsiva sobre la
voluntad de los pueblos. En síntesis, la deuda externa no es solo una cuestión
económica, sino es un instrumento de efectiva coacción política.
La dictadura genocida
cumple la función de implantar el terror, de imponer el escarmiento sangriento,
con el fin de limar la capacidad de resistencia del pueblo, ante los procesos
de brutal transferencias de riquezas, e imposición de un modelo económico y político,
que tiene por objeto el saqueo de las riquezas, el empobrecimiento del pueblo y
el endeudamiento de la Nación.
Ese proyecto político
económico, se bosqueja y plantea durante la dictadura, pero se impone
definitivamente en Democracia, sustancialmente durante los años de Menen y de la Alianza, es allí, en
democracia, donde se aplica el definitivo golpe financiero sobre el país y su
soberanía, que terminara estallando en el 2001 y con ese estallido, el Default.
El imperialismo
financiero no es un sujeto monolítico, conviven en el más, de mala manera, que
de buena, dos corrientes que tienen infinidad de puntos de conflicto y que en
la actualidad, en realidad desde hace tiempo, están enfrentados con una
ferocidad sorprendente. Se vive hacia el interior del imperialismo financiero,
una guerra sangrienta, en la que podemos
describir dos líneas bien claras, por un lado lo que definiríamos como, la línea
financiera retrasada, Americana, multinacional, fascista, con corazón en Estados
Unidos, compuesta por los sectores mas conservadores del poder político y económico.
Es el pentágono, es la industria armamentista, es George Bush, la banca Morgan.
Etc. Por otro lado aparece la línea financiera
globalista, conjunto de jugadores con intereses globales, dispersa por el
mundo, esto es el Departamento de estado, wall street, la reserva fiscal,
Obama, el HBSC.
La disputa entre estos
dos actores, que por supuesto no se circunscriben al territorio de los EEUU,
sino que se esparcen por el mundo entero, es el contexto en el que es necesario
leer el episodio "buitres," porque no es un episodio aislado, que se
direcciona hacia la
Argentina, sino que es un capitulo de la guerra entre estas líneas.
Porque Griessa y Singer son representantes de la línea financiera retrasada,
que pretenden agraviar, por un lado a los bonistas que son básicamente
jugadores rivales. Y también definen el ataque a la herramienta sustancial, la
restructuración de deuda soberana, boicotear el proceso de reestructuración, es
patear el tablero sobre el que juega el enemigo y lleva ventaja.
El fallo del juez Griessa
y de la corte de NY, pone a la
Argentina fuera del escenario, aleja la posibilidad del crédito
al país y la financiación a las empresas que pretenden invertir aquí. Griessa y la corte de NY, nos quieren obligar
a hacer lo que no podemos hacer, su línea de fuego esta sin dudas mas allá de
Argentina, apuntan a romper una estabilidad que es escenario de la preeminencia
en la disputa, de su archirival la línea
financiera globalizada.
En Argentina, vemos en el
tema Fondos buitres, dos tipos de posicionamientos que pueden aparecer, como
opuestas en vértices extremos, pero en realidad, ambas conducen al mismo punto.
Por un lado están los que
dicen. "Somos deudores seriales,
hay que honrar las deudas, deberemos subordinarnos al imperialismo financiero y
aceptar los fallos de Griessa y pagar a los buitres, tal como ellos
reclaman."
Por otro lado están los
que declaman. "Todo es parte de la estrategia del imperialismo financiero,
no debemos pagar nada, que se vayan al demonio"
En el primer grupo
podemos tener como ejemplo a Mauricio Macri, entre los otros a la izquierda mas
sectaria e inconducente. Unos y otros aunque se pretendan muy diferentes, están
planteando la misma salida, la guerra. Unos
proponen la guerra financiera subordinándonos mansamente a los centros
financieros mundiales. Los otros plantean directamente la guerra militar,
saliendo del contexto de las relaciones internacionales, de los países democráticos.
Ninguno de los dos, plantea la salida política al episodio buitres, que solo
tiene una salida, política.
Explicado el episodio
buitres, como un capitulo de una guerra feroz entre facciones del capitalismo
financiero mundial y planteada la política, como la única salida que tiene Argentina en este punto, queda preguntarse ¿cual es la posibilidad de inserción en un plano político
que tiene el país, en medio de un conflicto entre facciones infinitamente mas
poderosas.?
En este punto se hace
necesario agregar otros elementos a la descripción de los juegos de poder. Ya
dijimos que el imperialismo financiero no es univoco, que tiene fuertes
contradicciones hacia su interior y que esas contradicciones hoy se encuentran
en puntos de altísima tensión. Esas tensiones se expresan de muy diversas
maneras, que pueden ir desde la cuestión de los fondos Buitres en Argentina, el
asunto de Crimea y Ucrania, la disputa en Medio Oriente, Irak, Libia, Egipto,
son ni mas ni menos que expresiones de la tensión entre estas facciones del
imperialismo financiero.
A esta altura se hace
imprescindible sumar nuevos elementos al análisis. Por ejemplo que a diferencia
del año 2001 cuando la
Argentina entra en default, en el escenario de poder
internacional aparecen expresiones de poder por fuera del imperialismo
financiero, por primera vez en mucho tiempo el mundo ha dejado de ser unipolar,
o en el mejor de los casos con una bipolaridad neutralizada como en la guerra
fría, se ha transformado contundentemente y en forma clara en multipolar.
La aparición de nuevos
espacios de poder en la confrontación, hacen que a diferencia del 2001 hoy, la
crisis tenga una alternativa política de salida.
En efecto mas allá de
estas dos líneas financieras mencionadas, aparecen actores dentro de los que
podríamos definir, los estados, las naciones, como recuperadas formas de poder.
Las intervenciones de Rusia y China, en diversos
conflictos, marcan el fin de la hegemonía del poder financiero mundial en sus
dos facciones. En America Latina, la aparición de nuevos liderazgos en lo que
va del siglo, ha restablecido y consolidado le preeminencia del bloque regional,
sobre los acuerdos bilaterales con EEUU. Desde el rechazo al ALCA en el año
2006, la aparición y/o consolidación del
Mercosur, la CELAC,
la UNASUR, el
ALBA e incluso la Alianza
del Pacifico, son muestras de otra intencionalidad territorial, en la
construcción de poder en la región. Y
esta intencionalidad no solo se desarrolla localmente, sino que empieza a
articularse con otras expresiones similares en el mundo. Existe hoy, una
multiplicidad de relaciones estratégicas, por ejemplo SUR –SUR o Norte Sur con
actores muy diferentes, a lo que se conocía.
El llamado G7 es el grupo
de las siete naciones mas poderosas del mundo, EEUU, Inglaterra, Alemania,
Francia, Japón, China y Rusia. Hasta no hace mucho este bloque de poder era y
cada Nación integrante del mismo privilegiaba la relación con las otras
naciones que lo integraban hasta el punto de descartar cualquier cosa que se
establezca por afuera de la voluntad del grupo de los siete. Hoy las cosas ya
no son iguales, existe otro grupo que hasta no hace mucho se conocía como de países
prácticamente emergentes, pero que hoy han adquirido una importancia y una
solidez a nivel internacional, que cambia la configuración en el nuevo orden
del poder, transformándolo en multipolar. Este nuevo grupo, es lo que se conoce
como los BRICS, Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica. El BRICS es
fundamentalmente un nuevo punto de apoyo que ha ayudado y sigue ayudando a la
construcción del multipolarismo mundial.
Cuando se juegue la final
del mundial en Brasil, el Maracaná contará entre sus mas de 100.000
espectadores a los presidentes de los cinco países integrantes del BRICS. Al otro
día, en el estado de Fortaleza, se llevará a cabo la reunión de este grupo de
poder mundial, a la reunión esta invitada y concurrirá, la presidenta argentina,
Cristina Fernández de Kirchner, y no solo eso, una vez terminada la reunión,
cuando la presidenta vuelva, no lo hará sola, porque tanto el presidente Ruso,
como el Chino visitaran la
Argentina en una gira oficial, que tendrá como objetivo
discutir algunas cuestiones para nada menores.
Putin vendrá a Sudamérica
a proponerles a sus socios y también a la Argentina, la fundación del banco del Brics, además
llegará a la Argentina
a discutir inversiones para vaca muerta y la construcción de un ferrocarril
bioceánico que cruzara del atlántico al pacifico, lo que permitirá que Chile
pueda acceder a los puertos europeos del Atlántico y Argentina a los puertos asiáticos sobre todo Rusos y
chinos, con una enorme ventaja competitiva. El premier chino vendrá a discutir
entre otras cosas la financiación de Atucha IV, una nueva central nuclear a
desarrollarse en la
Argentina, que no solo nos pondrá dentro del
autoabastecimiento energético, sino que pondrá al país a la cabeza de la tecnología
mundial en la materia, contando con el procesos de enriquecimiento de uranio
por el método laser, una revolucionaria técnica desarrollada en Canadá que
Argentina ya posee y se encuentra en etapa de experimentación y desarrollo y
que le permitirá al país ser exportador de Uranio enriquecido al 8 %.
Todas las cuestiones aquí
planteadas, tienen como objeto poder entender cual es la diferencia entre este
momento donde el país se encuentra al borde del default técnico, con aquel
momento del 2001. Por entonces el mundo era absolutamente unipolar, el
imperialismo financiero funcionaba monolíticamente y EEUU era el amo
indiscutible del planeta en lo económico, en lo político y en lo militar. Hoy la
única supremacía que el “gran país del norte” sigue ejerciendo es la militar,
en lo económico esta previsto que para octubre China pase a ser la primer
economía del mundo, y en lo político la multiplicidad de actores es tan
evidente, los posicionamientos en los foros internacionales son tan claros, que
no es necesario decir que EEUU ya no es el amo del mundo, que a lo sumo se
puede decir que el planeta cada vez mas tiene una conducción colegiada, que la
disputa como debió ser siempre, hoy esta otra vez enfocada entre el poder
financiero y el poder político y que para la Argentina el “episodio
buitres” solo puede tener una salida política, esa salida que hoy parece
factible y que no existía en el 2001 cuando no había alternativa alguna, el
camino es la unidad latinoamericana, el fortalecimiento del Mercosur, de la UNASUR, la CELAC, las relaciones con la Alianza del Pacifico y la
interacción con los BRICS, y otras formaciones regionales internacionales como
ser los países de África y de Medio Oriente y sudeste asiático, la
multipolaridad es el objetivo, la unidad regional es el camino, la construcción
de un mercado común de 1000 millones de habitantes de sur América, centro
América y el Caribe, son objetivos políticos imprescindibles para enfrentar a
los buitres de afuera y de adentro.
Existe una campaña feroz
para generar la sensación de derrota y postrar la voluntad de lucha del pueblo
argentino pero es evidente que las cosas no son como antes eran.
En el año 2001, una misión
del ministerio de economía viajo a Suiza a discutir el problema de la deuda
externa, lo que se trajo en las valijas fue una disminución de las jubilaciones
del 13% y lo mismo para los sueldos de los empleados estatales. Hoy el ministro
Kicilof, se planta frente a los representantes de la asamblea de la OEA para decir que la Argentina quiere pagar y
no la dejan.
El fallo del Juez Griessa
tenia aspiraciones de ser un golpe de Estado, que terminara por postrar al
país, pero a pesar de todos los anuncios en tal sentido, la debacle sigue sin
llegar, la corrida cambiaria ha sido nuevamente controlada, la bolsa no ha
quebrado, ni mucho menos y la estabilidad económica y política, están lejos de
colapsar.
La imposición del juez
Griessa de poner al gobierno a negociar con los fondos buitres, es decir con la
expresión mas voraz del capitalismo financiero, lleva el objetivo de máxima de
obligar a negociar una retirada del kirchnerismo del poder en forma adelanta, o
en su defecto, imponer aquellas recetas fatídicas de los tiempos de De La
Rua. Nada
será tan fácil ahora, el mundo es otro, multipolar e interrelacionado, el país
es otro, solido y muy lejos de estar aislado del mundo.
Tener memoria es
fundamental, para entender que cosas quieren discutir los buitres y porque
Griessa nos obliga a discutir con ellos,
si no podemos pagar como ellos quieren cosa que ya saben que no podemos, otras
cosas tendrán para exigirnos en esas negociaciones, una disminución en los
salarios públicos y jubilaciones, dejar sin efectos las medidas destinadas a
impulsar el consumo, (la AUH
los subsidios en los servicios públicos. Etc.) Estas son las cosas que
tendríamos que pensar cuando decidimos si estamos del lado de Griessa y los
buitres o del lado del país y no solamente si odiamos a Cristina o queremos que
Bodou vaya preso.